BetoVI es un lugar donde la música es su medio natural de comunicación y, siguiendo con la naturaleza de nuestra identidad, el violín y la viola transmiten nuestro mensaje a la perfección.

Aprender a tocar un instrumento acompaña a los niños en su desarrollo proporcionando aprendizajes básicos en la vida como el manejo de la paciencia, la frustración, la responsabilidad y la capacidad de adquirir un hábito en su día a día a través de la música.

Combinando diferentes metodologías de la enseñanza del violín y la viola, y teniendo como base los métodos Colourstrings y Suzuki, en Betovi utilizamos nuestra propia metodología adaptando cada clase a la etapa evolutiva y situación de cada niño y adulto.

El método Colourstrings de enseñanza instrumental introduce a los niños a la música con un instrumento a modo de una experiencia agradable, estimulante y de forma muy musical. Asociando 4 colores (Verde, Rojo, Azul y Amarillo) a las cuatro cuerdas del violín y la viola, se dedica a desarrollar el intelecto, las emociones y las habilidades auditivas de los niños, como la formación del oído interno a través del uso de solfeo y de material didáctico para la enseñanza instrumental.

El método Suzuki para enseñar a tocar el violín y la viola, construido sobre cuatro pilares básicos, la escucha, la sensibilización musical, la técnica y postura correcta de su ejecución del arco y el refuerzo positivo de maestro y padre/madre. Su idea principal de estudio es considerar el talento como algo que se puede desarrollar, practicar y mejorar. Por tanto, la predisposición para la música es algo también cultural, que se puede fomentar y no necesariamente algo innato.

En todas nuestras clases para niños a partir de los 3 años, acompañados de un adulto hasta la adolescencia, el papel de los padres es fundamental. Los métodos que aplicamos para la enseñanza consideran valores importantes como el apoyo y aliento de los padres a los hijos, haciendo que aprender a tocar el violín o la viola suponga un momento de aprendizaje simultáneo y colaboración.

Como complemento a las clases individuales de instrumento, y pensando siempre en el enriquecimiento personal y colectivo de nuestros alumnos, una vez al mes ofrecemos clases colectivas, donde los niños aprenden a escuchar y tocar con otros compañeros a la vez que se refuerzan todos los aspectos aprendidos en las clases individuales.

Hacemos música de cámara desde los primeros contactos con el violín y la viola, a la vez que jugamos y sonamos con la música.

“La música crea orden en el caos: y es que el ritmo impone unanimidad sobre lo divergente, la melodía impone continuidad sobre lo inconexo y la armonía impone compatibilidad entre lo incongruente.”

– Yehudi Menuchin –